Si la semana pasada os hablaba de La Amenza Fantasma, hoy es el turno del segundo episodio de la saga, El Ataque de los Clones. Y aunque en el post anterior rompí una lanza a favor de George Lucas, hoy no puedo hacer lo mismo. Ya de partida os digo que, en mi opinión, esta es la peor de las seis películas, con diferencia.
Voy a ir por orden. Empezamos con un buen ritmo, atentado, jedis en acción y por si fuese poco tenemos a Yoda y Mace Windu en la primera media hora del largometraje. Pero no entiendo que clase de cable se les cruzó porque a partir de entonces Star Wars se convierte en Crepúsculo. Muy bonito Naboo (La Plaza de España, en Sevilla, siempre es bonita, para que engañarnos) y muy curioso Camino, pero hasta que a Jango Fett no le da por tocar un poco las narices a Obi-Wan, la película es ABURRIDA. Ni siquiera los tejemanejes del senado o el regreso de Anakin y Padme a Tatooine la salva. Por cierto, nunca me había fijado en lo mal que actúa Hayden Christensen, pero también puede ser por el contraste con Natalie Portman, que es genial, igual que siempre (espero que al ver el tercer episodio se me quite ese mal sabor de boca que me ha dejado el actor que da vida a Anakin). Creo que era necesario conocer el proceso de cambio de Skywalker, pero se entiende mucho mejor en La Venganza de los Sith que en este episodio en el que se centran demasiado en hacer ver especial una relación que ya lo era, sin necesidad de que los personajes pareciesen sacados de un libro de Stephenie Meyer.
Pero bueno, cuando Obi-Wan llega a Geonosis empieza lo bueno de la película, no todo iba a ser malo. Aparece Dooku por primera vez (que nadie se olvide del gran Christopher Lee), reaparecen los de la Federación de Comercio y sus droides (que por cierto, menuda manía le tienen a Padme) y además una gran arena con bichos grandes y feos que atacan a nuestros héroes (¿un guiño a los gladiadores?). Esto ya se parece un poco más a lo que conocemos como Star Wars. El momento en el que aparecen los Jedi y los clones podemos decir que tenemos a “la fuerza” en estado puro, para terminar con Yoda ,“la pulga saltarina”, en plena acción. El problema es que esto sucede durante los últimos 45 minutos de una película de más de dos horas y el balance, para mí, es negativo.
Se que mucha gente no opina como yo y piensa que el Episodio II es mejor que el primero (y que la principal razón es Jar Jar), ¡así que estaré encantada de leer otras opiniones!
Siento que algún día me vas a matar. (Obi-Wan a Anakin)
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